AcaPrensa / SPECOLA extracto
Tras los dos dramáticos boletines del sábado y domingo y la ligera mejoría del lunes, no terminan de llagar noticias positivas desde Gemelli a pesar de las ‘ligeras mejorías’; las condiciones del Papa Francisco “siguen siendo críticas, pero estables”. En la escasa actualización de la mañana se informa que ha descansado, y añade que “durante la mañana el Santo Padre recibió la Eucaristía”. La tarde estuvo dedicada a «actividades laborales”, pero ya no hay rastro alguno de la lectura del periódico, del descanso en el sillón y del desayuno que aparecían hasta hace unos días. Desde el apartamento del décimo piso es clara la intención de dar un mensaje al mundo exterior: el Papa Francisco sigue trabajando. Se intenta acallar los rumores sobre su estado de salud, el Papa Francisco quiere enviar un mensaje alto y claro y quiso recibir al Secretario de Estado y al Sustituto. No es una reunión de cortesía sino una reunión de trabajo y parece que el Papa Francisco “quiere cerrar cuestiones abiertas”. Sobre el ‘fortalecimiento’ del papel de la mujer, el balance del pontificado es «más bien escaso» y “sabe que su herencia está en peligro y quiere protegerla”.
En los últimos días muy pocas personas han visitado al Papa Francisco y se ha pedido la máxima confidencialidad. La única visita que Francisco hizo pública intencionalmente fue la del primer ministro italiano. Algunas reuniones previstas han sido canceladas, incluso las que tenía con los jefes de los distintos departamentos con los que se reúne habitualmente. Firma decretos y convoca un consistorio, sin fecha, una señal clara dirigida sobre todo a los miembros del Sacro Colegio: Yo sigo aquí y gobierno.
La tomografía computarizada de tórax realizada al Pontífice mostró una «evolución normal de la inflamación pulmonar», indicando un progreso en la curación. Luca Brunese, presidente de la Sociedad Italiana de Radiología Médica: «El TAC nos dice que está mejor. Cuando los médicos hablan de ‘evolución normal del cuadro inflamatorio pulmonar’ significa que el foco neumónico se ha reducido tanto en tamaño como en densidad y que el parénquima pulmonar está nuevamente libre. A pesar de los signos positivos, la situación clínica del Papa Francisco continúa bajo estrecha vigilancia. La insuficiencia renal leve observada en los últimos días se ha resuelto y no se han producido nuevas crisis respiratorias.
Sin embargo, el Papa Francisco continúa con la terapia de oxígeno de alto flujo y la fisioterapia respiratoria para ayudar a mejorar la función pulmonar. «Los resultados de la tomografía computarizada nos dan esperanza, pero la situación sigue siendo delicada. Es comprensible que el pronóstico siga siendo reservado». Los médicos mantienen una actitud muy cautelosa, un «pronóstico reservado» que «no puede resolverse porque la infección aún no ha sido eliminada». “No se descarta una reunión de prensa con los médicos para ponerlos al día sobre la situación general antes de fin de semana”. Nos dicen que «el Papa puede comer con normalidad” y no hay noticias de otras visitas recibidas. El uso del adjetivo “crítico” para hablar de las condiciones de salud del Papa Francisco es llamativo y “la primera vez que se utilizó este término fue cuando los médicos dijeron que Francisco no está fuera de peligro y que por tanto el pronóstico es reservado”.