OLIVERA RAVASI ES DESTINADO A LOS ESTADOS UNIDOS PARA UNA MISIÓN EVANGELIZADORA

El sacerdote argentino Padre Javier Olivera Ravasi, conocido por su labor evangelizadora en el mundo hispano y por su papel en el movimiento «Que No Te La Cuenten», ha sido oficialmente destinado a los Estados Unidos por sus superiores de la Orden San Elías, con el objetivo de fortalecer la misión católica en una región donde la presencia hispana sigue creciendo y se hace cada vez más necesaria la defensa de la fe.
En una comunicación reciente dirigida a sus seguidores, el padre Olivera explicó que esta decisión fue tomada durante 2024, tras recibir múltiples pedidos por parte de obispos estadounidenses que solicitaban su presencia permanente para continuar con su labor pastoral y doctrinal.
El sacerdote indicó que San Francisco fue elegido como el lugar ideal para cumplir su misión, debido a su simbolismo cultural y la necesidad de una fuerte contrarrevolución católica. “Cuna del movimiento hippie y meca de la ideología de género”, la ciudad representa un verdadero campo de batalla espiritual, donde Olivera espera predicar la fe con valentía, en línea con la visión de la Orden San Elías de llevar el Evangelio tanto a tierras no cristianas como a los frentes de lucha cultural contemporánea.
Inspirado por las palabras de San Pablo, “donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia” (Rm 5,20), el padre reafirma su compromiso con “el buen combate de la Fe”.
Nuevas responsabilidades pastorales
Desde su llegada, el padre Javier Olivera Ravasi se ha integrado como vicario parroquial en la Parroquia Star of the Sea, una iglesia reconocida por su sólida formación católica y su colegio, donde los niños son educados en las humanidades clásicas. La parroquia pertenece a la Arquidiócesis de San Francisco, liderada por Monseñor Salvatore Cordileone, destacado por su defensa de los valores cristianos.
Además, ha sido nombrado Capellán del pueblo hispano en el santuario Our Lady of Guadalupe, fundado por el Cardenal Raymond L. Burke, al cual el padre Olivera asistirá una vez al mes para continuar su labor con la comunidad latina.
Citando el pasaje bíblico de Génesis 50,20, el padre Olivera comparó su misión con la historia de José: “ustedes lo hicieron pensando hacerme un mal, pero Dios lo ha usado para el bien”, dejando entrever que esta nueva etapa representa no sólo un desafío, sino también una oportunidad para que la gracia divina se manifieste en un terreno necesitado de luz y verdad.
Con su habitual sello “Que no te la cuenten”, el padre cierra su mensaje con la determinación de seguir evangelizando con firmeza en un mundo cada vez más alejado de la verdad revelada.
AcaPrensa / InfoVaticana